El Palacio Montcada de Fraga acoge desde hoy y hasta el próximo 12 de marzo la exposición Una estrella para un deseo, que recopila pinturas y esculturas elaboradas por doce personas con discapacidad intelectual asisitidas por otros tantos artistas aragoneses. Entre los participantes figuran dos usuarios de Atades fragatinos: Jaime Vila y José Luis de la Osa. En la realización de las obras que presentan en Fraga les han ayudado respectivamente el pinto oscense Alberto Carrera Blecua y la artista fragatina Divina Sabaté. Artemio Puch, responsable de Atades en Fraga, ha destacado durante la presentación la importancia del trabajo desarrollado por los artistas y sus asistentes.
A la inauguración, celebrada esta mañana a las 12.00 han asistido, además del propio Puch y otros responsables locales de Atades, el Alcalde de Fraga Santiago Escándil, el Presidente de la Comarca Francisco García, concejales del equipo de gobierno como Sofía Barco, Carmen Querol o José Ignacio Gramún y el gerente de Atades en Huesca José Luis Laguna. Todos ellos han destacado la excepcional sensibilidad que los artistas –y usuarios de los servicios de ATADES- han reflejado a las diferentes obras que componen la muestra. Santiago Escándil ha agradecido la labor de Atades, una entidad, dice el primer edil, cuyas iniciativas siempre sorprenden: “No sé cuándo será, pero imagino que en algún momento dejaréis de sorprendernos, pero espero que tarde en llegar. Con iniciativas como ésta demostráis de lo que son capaces las personas con discapacidad”. En la muestra se recopilan un total de doce obras realizadas por otras tantas personas con discapacidad intelectual asistidas por artistas como Vicente García Plana, Miguel Mainar, Eduardo Cajal, Pilar Bernad, Ramón Faro o los ya citados Divina Sabté y Alberto Carrera Blecua. José Luis de la Osa y Jaime Vila, los dos fragatinos que presentan obras en la muestra, explicaban esta mañana sus experiencias con los artistas y durante la elaboración de las obras mostrando ambos su satisfacción. Los dos, explicaban, se habían sentido útiles, capaces y llegaron a una especial sintonía son sus particulares asistentes.
